jueves, 7 de febrero de 2019

Si se falsifica algo es porque hay margen.

Las colonias y perfumes que creo que inicialmente se usaban para disimular el olor corporal, son productos que nos han engañado para usarlos todo el tipo como algo que nos identifica, un olor peculiar, distinto al olor natural de nuestro cuerpo, que la verdad que cada vez es peor, mejoró nuestro olor con la llegada del agua caliente y las duchas, pero volvió a bajar conforme nuestra alimentación empeoró ya que parte de la olor que desprendemos es lo que absorbemos comiendo, también podemos tener partes muertas del cuerpo que son constantemente regeneradas y eso causa también mal olor, por ejemplo las muelas con los nervios matados, eso explica mucha alitosis.
Pero quería comentar acerca de los elevados precios de los perfumes que no hubieran subido tanto de precio de no ser porque la mujer se incorporó al mercado laboral, e incluso se independizó del hombre, la mujer ahora tiene más autonomía para despilfarrar su sueldo en accesorios o adornos del cuerpo incluyendo el perfume como un adorno. Los precios de los perfumes varian mucho dependiendo de la fama creada por distintos medios publicitarios, este trabajo conjunto para aumentar el precio de esos productos normalmente no quiere ser estorbado por productos falsificados que conocen los elementos utilizados en esos perfumes, y los pueden producir exactamente igual, pero a otro precio no tan exageradamente elevado, esto puede ser llamado copia o falsificación, ya que dentro de la definición de copia va la de "no autorizada", por eso es una falsificación, no necesariamente por tener componentes distintos, que en ocasiones también puede darse, y esta incertidumbre es la que utilizan para darnos miedo a no comprar falsificaciones, a que pueden tener elementos que dañen el cuerpo más que los originales.

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